El sociólogo Javier Elzo acaba de publicar
La voz de los adolescentes (Editorial PPC). En él, desgrana "la nueva edad del pavo", las identidades modernizantes de los nuevos adolescendetes y las adicciones a las nuevas tecnologías que manifiestan los jóvenes.
Un relato que Elzo vietre en el libro. Txomin no tiene duda de qué llevaría a una isla desierta: "Llevaría un teléfono móvil para llamar a cualquiera. Es que sin móvil hoy en día...", señala, sin reparar en que, por más que se encarame a un cocotero, es poco probable que tenga cobertura.
Tras admitir su "
dependencia" -"podría vivir sin el teléfono móvil, pero muy estresado", confiesa- Txomin censura a quien lo utiliza para grabar palizas. "No veo normal que se estén pegando dos y lo primero que hagas sea sacar el móvil para grabarlo. Si te metes en internet, tienes mil vídeos".
'Messenger' y los videojuegosEnganchados al messenger y los blogs, donde cuelgan "fotos, canciones y vídeos", todos son conscientes de que en internet pueden encontrar amistades peligrosas. "Si pones tus fotos, igual luego te raptan", plantea uno de ellos temeroso, mientras que Janire Osa, todo un torrente de vitalidad, cree que lo verdaderamente arriesgado es "quedar con desconocidos". "La mayoría de veces, cuando te agrega en el messenger alguien que no conoces, empieza a decir chorradas, pero le borras y ya está", zanja, sabedora de que está a salvo con sólo cliquear el ratón. Con las amigas, dice, habla de "cotilleos o de a qué hora quedamos". "O de qué me pongo para mañana", hace de apuntador un chaval, mientras ellas se rinden a la evidencia y sonríen.
Pese a los temores paternos -que, como algunas variables, suelen tender a infinito-, los aficionados a los videojuegos aseguran saber distinguir perfectamente ficción y realidad. "Y el que no sepa, qué tonto es, porque no vas a empezar a matar a gente por la calle creyendo que son marcianos", señala Urtzi, antes de ser poseído de nuevo por la risa floja. Txomin, en cambio, reconoce que algunos chavales sí que imitan a sus personajes preferidos. "No vas a ir con una escopeta pegando tiros, pero yo sí he visto a gente pegándose como si fueran los luchadores de Pressing Catch y acaban haciéndose daño de verdad", da fe.
Fuente:
argijokin.blogcindario.com